martes, 15 de mayo de 2012

Por el interés te quiero Andrés

Hace un mes aproximadamente estuve con las amigas de mi prima en casa de una de ellas. Hablando un poco de todo y en nuestro intento de arreglar el mundo, un amigo de mi prima pronunció las siguientes palabras:

- Hoy en día tal y como están las cosas, las personas cuando entablan una relación no se fijan en la calidad humana de la pareja, sino en si tienen trabajo o piso.

Tanto yo como el resto nos quedamos completamente horrorizadas. ¿Qué ahora la gente te quiere por lo que tienes y no por lo que eres? ¡Lo niego absolutamente!

Evidentemente todos rebatimos esa postura, pero ya en una reflexión más pausada y fría creo que el amigo de mi prima tiene razón, pero sólo en parte porque no es nuevo que la gente quiera a la gente por lo que tiene y no por lo que es, independientemente de si hay crisis económica o no. ¿Acaso no ha habido toda la vida matrimonios apañados para juntar capitales? ¿Acaso no nos fijamos en las posesiones de las personas y las valoramos más cuantos más bienes materiales tienen?

Me niego rotundamente a creer que ahora, debido a la situación en la que vivimos, la gente sólo busque entablar relaciones con personas que tienen trabajo y casa. Quizás sea la última romántica - o la última tonta - pero creo que eso no es lo que decide que los seres humanos elijan a una pareja. No al menos en el ámbito en el que yo me muevo.

Pero tampoco podemos negar que la crisis actual es una crisis económica, financiera y de valores, y que siempre, siempre, siempre, han existido - y supongo siempre existirán - las relaciones basadas única y exclusivamente en el interés económico. Quizás porque en el fondo no dejamos de ser homínidos que luchan por la supervivencia. Y a veces la supervivencia se basa en eso: en lo económico